Ahora que llega el verano y comenzamos a disfrutar de nuestro jardín y terraza y realizamos un uso intensivo de nuestra barbacoa, queremos darte unos consejos como expertos para que la mantengas como nueva.
Te recomendamos que limpies tu barbacoa de exterior después de cada uso utilizando un cubo de agua tibia y detergente. Con una esponja, escurre el agua sobre las parrillas de cocción y calientaplatos.
Enciende los quemadores a nivel medio y mantén la tapa cerrada durante 3 minutos. El uso de este método favorecerá una fácil limpieza por la ayuda del vapor que se desprende, de manera que eliminará la mayor parte de la suciedad y será mas fácil de limpiar.
Los difusores y las parrillas se pueden poner en la lavavajillas dejándolas impecables para su próximo uso. No utilices materiales abrasivos como cepillos de aluminio que pueden causar ralladuras.
En zonas de playa, la sal en el aire puede causar la oxidación y el envejecimiento del metal. Tampoco hay que olvidar que en la zonas de interior debido a la contaminación es posible que el metal se vea afectado. Por tanto, es conveniente proteger la barbacoa limpiando su superficie y evitando así que la contaminación pueda deteriorar la superficie.
Nuestro consejo en estos casos es que limpies la superficie rociando con agua usando una manguera para eliminar la suciedad y enjuague los quemadores con agua tibia, detergente no abrasivo y un paño suave. Por último, no olvides eliminar los residuos de jabón que puedan quedar en la superficie.
Esperamos que estos consejos te ayuden a conservar tu barbacoa como nueva durante mucho tiempo.